Bailongu, escuela de baile
A las once y media de la noche llegaban las primeras parejas y la música, bajo la batuta de Jordi González, Gonzo, empezaba a sonar con melodías de todo tipo, preparadas para hacer bailar.
El sábado 14 de mayo de 2011 todos aquellos que transitan los primeros pasos de baile estaban convocados en Bailongu para rodar por la pista y vivir momentos mágicos de baile y de amistad. Allí estaban todos los profesores y profesoras, y también nos acompañaban habituales del nocturno bailar. Pronto la sala estaba llena y todo el mundo bailaba sin cesar, con sonrisas en la cara y, tocando al suelo, los pies marcaban pasos después de contar. Cuando os explique como fue todo, alguien de los que estaban allí..., ¡preguntaréis por la próxima cita!
Canción tras canción, ritmo tras ritmo, la pista giraba sin cesar y este es el mejor homenaje a la gente de Bailongu: buenas caras, animaciones, y una muestra de muchos de los ritmos bailada por el profesorado, mostrando cómo lo más difícil parece fácil de girar. La noche permitió compartir con los compañeros momentos de baile, girar con los profesores de pareja, comprobar que los pasos salen mucho mejor del que uno podía imaginar..., y sobre todo, la conclusión: ¡a bailar se aprende bailando! Definitivamente, el baile de novatos mueve Bailongu. ¡Gracias!
Mayo 2011